¿Conoces a los siete fundadores de la Orden de los siervos de María?

En el siglo XIII, un grupo de siete jóvenes -la mayoría de origen noble- provenientes de la República de Florencia (hoy parte de Italia) decidieron abandonar sus riquezas para entregar sus vidas a Cristo y al Evangelio. Para dar aquel gran paso, ellos se habían encomendado fervientemente a la Madre de Dios. Con el tiempo su grupo se convertiría en la Orden de los Siervos de María; cuya fiesta conmemoramos hoy, 17 de febrero.

Eran siete amigos, comerciantes de la ciudad de Florencia, Italia.

Sus nombres: Alejo, Amadeo, Hugo, Benito, Bartolomé, Gerardino y Juan.

Pertenecían a una asociación de devotos de la Virgen María, que había en Florencia, y poco a poco fueron convenciéndose de que debían abandonar lo mundano y dedicarse a la vida de santidad. Vendieron sus bienes, repartieron el dinero a los pobres y se fueron al Monte Senario a rezar y a hacer penitencia. La idea de irse a la montaña a santificarse, les llegó el 15 de agosto, fiesta de la Asunción de la Stma. Virgen, y la pusieron en práctica el 8 de septiembre, día del nacimiento de Nuestra Señora. Ellos se habían propuesto propagar la devoción a la Madre de Dios y confiarle a Ella todos sus planes y sus angustias. A tan buena Madre le encomendaron que les ayudara a convertirse de sus miserias espirituales y que bendijera misericordiosamente sus buenos propósitos. Y dispusieron llamarse «Siervos de María» o «Servitas».

Fuente: Aciprensa