Durante la última década, el estudio de animación PIXAR residió en una zona de confort produciendo secuelas de sus obras maestras, con mejor o peor resultado en lo que a calidad se refiere, y estrenando un par de historias originales que, eso sí, se convirtieron inmediatamente en clásicos del cine de animación como “Coco” (2017) o “Del revés” (2015). En la actualidad, parece ser que el estudio se ha renovado y vuelve a crear obras originales, con películas como la notable “Onward” (2020) o esa obra maestra titulada “Soul” (2020).
En el verano de 2021 se estrenó la cinta de animación “Luca”, dirigida por el italiano Enrico Casarosa, autor también del magistral corto “La luna” (2011). El lanzamiento de la película se llevó a cabo en el contexto de pandemia que vivimos desde el inicio de 2020, por lo que se terminó estrenando en la plataforma Disney Plus. Esta decisión no fue aplaudida por los trabajadores del estudio PIXAR ni por los exhibidores, para quienes supuso una decepción el hecho de no poder disfrutar en las salas de cine de una cinta animada que está diseñada prioritariamente para la pantalla grande. La imposibilidad de ver el filme en los recintos cinematográficos restó calidad a la experiencia de su visionado, y causó daños y pérdidas económicas a los exhibidores.
El protagonista de la historia es Luca, un pequeño monstruo marino que descubre con fascinación la vida encima de la superficie gracias a su nuevo amigo Alberto. Ambos tendrán que esconder sus verdaderas identidades para sobrevivir entre los humanos, en un hermoso pueblo junto al mar en la Riviera italiana.
“Luca” es una notable comedia de aventuras, con una bellísima e imaginativa animación llena de frescura, que recuerda a las creaciones de los Studios Ghibli. Una fábula que nos habla sobre la amistad en la niñez y sobre la tolerancia, ambientada en un idílico pueblecito de la costa italiana. La cinta está plagada de guiños al cine italiano más icónico, desde referencias a Fellini, Tornatore o Visconti, hasta homenajes nada disimulados a la película “Vacaciones en Roma” (William Wyler, 1953).
Cierto que el inicio resulta algo monótono y que a la película le cuesta arrancar, pero una vez que Luca y Alberto llegan al pueblo, la aventura y el ritmo de la película nunca decaen. La moraleja de este cuento veraniego anima a perder el miedo a lo desconocido, a valorar que lo diferente enriquece la vida de las personas y a no marginar a nadie, sean cuales sean sus circunstancias. Cuestiones y situaciones decisivas cuando se experimentan en la infancia o la adolescencia, y que definen los principios y valores del adulto del futuro.
Juan Carlos Deán del Junco
