¿Qué es el tabernáculo o sagrario?

Aunque Dios no está limitado a un espacio físico ni necesita habitar en lugares hechos por mano humana, Él quiso -en el tabernáculo- tener un espacio físico como lugar de encuentro con su pueblo pues Él quiso acercarse más al hombre y caminar con él. Para el pueblo de Israel era muy significativo el hecho de tener un lugar palpable y permanente en medio de ellos donde encontrarse con Dios y adorarlo.

El tabernáculo es llamado en hebreo ‘morada’ o ‘residencia’; pero es un término que proviene de la palabra latina tabernaculum que quiere decir tienda de campañaTabernaculum es diminutivo de taberna que significa caseta, enramada o cabaña.

Por tanto en el tabernáculo Dios moraba como rey de su pueblo y recibía el culto que merecía, aunque también era un hecho profético que después se cumplió en Jesucristo.

El tabernáculo fue construido por el pueblo de Israel según las instrucciones dadas por Dios por medio de Moisés (Éxodo cap 25). Cuando se terminó la construcción del mismo la gloria de Dios lleno aquel lugar y la nube que los guiaba descanso sobre el tabernáculo, tanto así que la gloria y la nube eran tan fuertes en aquel lugar (Éxodo, 40).

Por tanto la gloria del tabernáculo no se encontraba en los materiales finos y delicados que se emplearon para su construcción sino en la gloria del señor en el Tabernáculo; sin su gloria todo lo de más estaría vacío.

El tabernáculo era una especie de templo o santuario móvil y fue hecho de manera práctica ya que resultaba fácil desarmarlo y transportarlo durante la travesía en el desierto o el éxodo. Un aspecto a considerar era que el tabernáculo se ubicaba en el centro de las doce tribus de Israel.

El tabernáculo cumplió su función hasta  que  Israel se consolidó en la tierra prometida. El rey David expresó el deseo de construir un templo, pero la tarea finalmente la llevó a cabo el rey Salomón construyendo el templo de Jerusalén. La disposición de éste templo era igual a la del tabernáculo.

El tabernáculo tenía varios nombres: tienda del encuentro, el tabernáculo de reunión, la tienda del testimonio.

Tabernáculo o sagrario son conceptos muy afines y que por tanto siempre se toman el uno por el otro al significar lo mismo: lugar destinado a la reserva de la Eucaristía.

El sagrario o tabernáculo es un pequeño recinto, a modo de caja, donde se guarda la Eucaristía después de la celebración para que Jesús Eucaristía sea adorado. La palabra “sagrario” ya indica que es el lugar donde se guarda lo sagrado.
 
Entre los primeros cristianos, el sagrario fue ocupando el lugar del arca de la alianza (del antiguo Testamento). Efectivamente, el sagrario cumple plenamente la función asignada antaño al arca de la alianza. Es la sede del Santísimo. Es la nueva tienda del encuentro entre Dios y el hombre, el trono que lo coloca en medio de nosotros.

Por tanto el tabernáculo es el elemento más importante que hay en una iglesia aunque en ciertas ocasiones no esté en el altar mayor. Y es el elemento más importante porque es el lugar donde se reserva la Eucaristía.

“El sagrario (tabernáculo) estaba primeramente destinado a guardar dignamente la Eucaristía para que pudiera ser llevada a los enfermos y ausentes fuera de la misa. Por la profundización de la fe en la presencia real de Cristo en su Eucaristía, la Iglesia tomó conciencia del sentido de la adoración silenciosa del Señor presente bajo las especies eucarísticas. (…).

El Sagrario debe estar construido de tal forma que subraye y manifieste la verdad de la presencia real de Cristo en el santísimo sacramento” (Catecismo, 1379).

Fuente: Aleteia