Cátedra de San Pedro (C)

Lectura del santo evangelio según san Mateo (16,13-19):

En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?»
Ellos contestaron: «Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas.»
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?»
Simón Pedro tomó la palabra y dijo: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.»
Jesús le respondió: «¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo.»

22-02-19Comentario

Tú eres Pedro
La festividad de la Cátedra de San Pedro que la Iglesia celebra hoy se anuda con el Evangelio de Mateo, una variante del que se proclamaba ayer, de Marcos. Aquí, en Mateo, Cristo pone los cimientos de su Iglesia. No sobre Pedro, el primer Papa, como solemos atribuir con una lectura apresurada de la perícopa, sino sobre su confesión de fe en un Dios hecho hombre: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.» Y no es una respuesta humana, sino inspirada. Se la revela el Espíritu Santo, el que vivifica y aglutina a la Iglesia desde este primer instante y, sobre todo, desde el instante de Pentecostés. A tal respuesta revelada, Jesús le da réplica casi en los mismos términos: «Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia». La asamblea de los cristianos está fundada sobre esa piedra en la que se hunden los cimientos de nuestra profesión de fe: la de que la Segunda Persona de la Trinidad se encarnó de María la Virgen por obra del Espíritu Santo; por nuestra salvación padeció, fue muerto y sepultado y resucitó al tercer día, conforme a lo que anunciaron las Escrituras.

Post relacionados