AMOR Y TIEMPO

 
 
“El tiempo que dedicaste a tu rosa, es lo que hace que ella sea tan importante para ti” (El Principito)
 
 
 
 
 
 
La vida está hecha de tiempo. Todo el  que dediquemos a las personas que queremos será necesario para cultivar nuestro amor hacia  ellas. 
 
El tiempo es la prueba del amor; un amor que dura es un amor verdadero frente a un amor que no resiste el tiempo…
 
Hoy existe un miedo al compromiso”, al “para siempre”.
 
Hablas con parejas de novios y les preguntas: ¿cuánto estarías dispuesto a luchar por tu matrimonio? .La respuesta mayoritaria es “hasta que se acabe el amor”.
 
Piensan que prometerse fidelidad para toda la vida es una empresa demasiado difícil, es muy exigente y casi imposible el “para siempre”.
 
Nos dice el Papa Francisco: “Como el amor de Dios es estable y para siempre, así el amor que construye la familia queremos que sea estable y para siempre”.“..No fundarla sobre arena, sino sobre la roca del amor auténtico, el amor que viene de Dios
 
Hay que ver qué se entiende por amor. No es un mero sentimiento, como muchas personas piensan. Es un “construir juntos” sobre algo sólido. Es un camino de generosidad,  un  “vivir por y para el otro”.  El tiempo que le dediquemos a alguien nos da la medida en que le amamos. Pero para que dure hace falta voluntad de amar.
 
El amor es un don que nos remite al amor originario que es Dios. 
 
Es una tarea también, es vivir para el otro sin tener en cuenta el tiempo. Es un camino de generosidad donde no puede faltar el perdón. Las crisis que se pueden plantear en la vida, son ocasiones de crecer. 
 
El amor “para siempre” se consigue rezando juntos, ofreciendo nuestras vidas, renovando nuestro amor día a día. Como dice el Papa Francisco a los futuros matrimonios: Aprender a rezar así, “Señor danos hoy nuestro amor de cada día”….