Tiempo de Semana Santa, tiempo de vida y esperanza

En la revista Iglesia en Sevilla del Arzobispado de Sevilla, en su número 381, especial de Semana Santa y Pascua, aparece un artículo editorial de nuestro arzobispo monseñor José Ángel Saiz Meneses, que lleva por título En camino hacia la Pascua. En dicho artículo nos invita a vivir con toda la profundidad e intensidad de nuestra fe el itinerario espiritual que comienza con el Domingo de Ramos. Ya en el tiempo de Cuaresma nos hemos estado preparando para ello. Nos conduce el arzobispo de Sevilla a través de los acontecimientos que vivió Jesús desde su entrada en Jerusalén, con palabras de monseñor Saiz Meneses “la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén y aquella acogida entusiasmada que tuvo por parte de la gente buena y sencilla” hasta la Pascua de Resurrección donde “esperamos la noticia gozosa que Jesús vive para siempre y está con nosotros para darnos vida y esperanza”.

Necesitamos la vida y la esperanza que da la noticia de la Resurrección, “victoria sobre la muerte y el pecado”, junto con el permanente mensaje evangélico que nos dejó Jesús en sus años de predicación y vida pública. En otro momento de esta Semana Santa, monseñor Saiz Meneses incidió en la misma idea: “Jesús resucitado está presente como fuerza de esperanza a través de su Iglesia, y de hace cercano a cada situación humana de sufrimiento e injusticia, de lucha y superación”. En aquellos tiempos de la Entrada Triunfal, Pasión, Muerte y Resurrección del Salvador se manifiestan vivencias que recogemos en nuestra Semana Santa y podemos en el Nuevo Testamento en los Evangelios y en los Hechos.

Queremos recordar aquí que el Jueves Santo es el Día del Amor Fraterno, un amor del que el mundo hoy muestra en muchos lugares carencia. En el número citado de Iglesia en Sevilla hay un artículo de Ainhoa Ulla titulado “Haced vosotros lo mismo”, donde nos dice que la Semana Santa nos ayuda cada año a comprender el verdadero significado del Amor que Dios nos tiene, con especial referencia al Día del Amor Fraterno, “una nueva llamada a dejarnos mirar por Jesús”.

El papa Francisco ha dicho que “proclamamos que el Señor de nuestra vida, es la resurrección y la vida del mundo (Juan 11,25), meditando que Pascua significa “paso”, porque en Jesús se realizó el paso decisivo de la humanidad: de la muerte a la vida, del pecado a la gracia, del miedo a la confianza, de la desolación a la comunión”.